¡Los vídeos de boda no paran!
Gracias a todos y todas por regalarnos éste 2021
Un año con un arranque complicado: miedo, restricciones, incertidumbre, nuevos aplazamientos y una nube negra sobre nuestras cabezas recordándonos lo sucedido el año previo.
Contra todo pronóstico y haciendo balance, os aseguramos que ha sido un año espectacular. Lógicamente, no hablamos de números ni de volumen de trabajo; hablamos de vosotros: nuestros novios.
Gracias a vosotros hemos tenido la oportunidad de grabar el vídeo de vuestras bodas en lugares únicos como las playas de Tarragona o los bosques de Soria. Grabar con nuestras cámaras reportajes idílicos e imprescindibles en nuestra Zaragoza con el Pilar de fondo, en el Pirineo oscense e incluso hemos vuelto a pisar la verde Navarra.
Y como siempre, donde quiera que celebréis el día de vuestra boda estaremos encantados de ir. Porque para Etéreo, poder filmar un día lleno de emociones es el mejor regalo que podéis hacernos. Vuestra confianza nos permite llegar a lugares donde otros no pueden; convertimos las cámaras en nuestra mirada y reflejamos los mejores momentos en nuestros vídeos.
¿Cómo viven el día de la boda los videógrafos?
Fácil, no solo trabajamos con las cámaras, trabajamos con la energía. Compartimos vuestra emoción y en pocos minutos sentís como si hubiéramos estado a vuestro lado toda una vida y además… ¡hacemos «desaparecer» las cámaras! ;).
«¡No recuerdo que ocurriera eso!». Es una de las frases que más escuchamos porque para eso somos profesionales del vídeo de boda. Sabemos donde y cuando va a suceder el abrazo, la lágrima, el regalo, el baile… nos adelantamos como Nicolas Cage en Next.
Nos emociona editar y montar el metraje. Cuando os entregamos el resultado vuestro feedback es nuestra alegría. El mejor regalo es la satisfacción del trabajo bien hecho.
En definitiva, por esto y por lo que vendrá. Compartimos con vosotros tantos momentos íntimos que es imposible no encariñarnos. Os deseamos salud y felicidad.
Por seguir haciendo la Familia Etéreo más grande. Gracias.
P.D. A nuestras parejas de 2022: Let’s get ready to the rumble!